El dueño de Tod’s prepara el relanzamiento de Schiaparelli
Schiaparelli prepara su vuelta. La mítica casa de costura francesa dará el pistoletazo de salida esta semana con una exposición en el Costume Institute del Metropolitan Museum of Art (Met) y con un plan de desarrollo, que llevará de nuevo a la firma al mercado, creado por el dueño de la enseña, el empresario italiano Diego Della Valle. El dueño de Tod’s contará con el apoyo de Farida Khelfa como nueva portavoz de la enseña.
Della Valle se encuentra en pleno proceso de búsqueda de un diseñador para Schiaparelli, cuya sede central estará en el número 21 de la Place Vendôme de París. Previsiblemente, el anuncio del nuevo creador de la enseña se realizará en septiembre y los primeros productos de la nueva Schiaparelli podrán adquirirse en febrero del año que viene, según WWD.
La enseña centrará sus mayores esfuerzos en la creación de accesorios, fragancias y cosméticos. No obstante, también contará con algunas piezas de ropa.
En mayo de 2006, Diego Della Valle se hizo con los archivos y las marcas registradas de Schiaparelli, a través de la sociedad personal Diego Della Valle & Company y, desde entonces, ha descrito a la enseña como su proyecto de futuro que, ahora, finalmente se pone en marcha.
Con la cobertura mediática que la exhibición Schiaparelli and Prada: Impossible Conversations del Met traerá consigo, Della Valle ha encontrado el momento justo para activar su negocio. Según explicó el dueño de Tod’s “esta marca no tiene que verse envuelta en el frenético mundo de los números, cuentas y dimensiones sino sólo expresarse como es. El punto más importante de este proyecto es la maison en París en la Place Vendôme, la ubicación original del primer taller de Schiaparelli”.
Elsa Schiaparelli fue vista como la rival directa de otra gran diseñadora del siglo XX: Gabrielle Chanel. No obstante, los diseños de Schiaparelli estaban muy influenciados por el surrealismo. La creadora cerró su casa de costura en 1954 y falleció en 1973.
El relanzamiento de la maison llega tras la vuelta al negocio de la moda de otras enseñas como Moynat, comprada por el conglomerado de lujo LVMH. La marca, especializada en maletas y bolsos, abrió a finales de año una tienda de 200 metros cuadrados en el número 348 de la rue Saint Honoré.
