Colombia aprueba la ley de patrimonio que permite vender el oro de los galeones
De nada ha servido la llegada a Colombia de avisos desde todo el mundo ante el peligro de que el gobierno de Juan Manuel Santos legalice la caza de tesoros. Según informa El Tiempo, la nueva Ley de Patrimonio que permite contratar empresas extractoras y pagarles con el 50% de lo extraído en oro, plata y lingotes, salió adelante anoche, con 11 votos en contra y 78 a favor, en la Cámara de Representantes.
El llamado proyecto 125 anuncia la excavación de naufragios en términos que no gustan a los más importantes arqueólgos de todo el mundo y con un criterio que es antagónico al de la Convención de la Unesco para la salvaguarda del patrimonio sumergido. Se basa en que una comisión podrá decidir que el oro, plata, joyas y lingotes extraídos dejarán de ser considerados patrimonio y protegidos como tal debido a su abundancia. Este "criterio de repetición" ha sido sancionado por la Corte Constitucional colombiana en 2003, después de atender al criterio de, entre otros, el de Robert Marx, uno de los cazatesoros más célebres de la historia, que depuso esa idea de la repetición ante el Alto Tribunal. Se trata de que, si una pieza abunda, se deja una muestra para las instituciones culturales y el resto se vende.
La polémica se reflejó también en el debate: varios arqueólogos protestaron en el Congreso con camisetas que pedían no entregar el patrimonio a empresas exploradoras marinas. Desde ya anunciaron una demanda contra el proyecto de Ley, que contraviene algunos artículos de la Constitución.
Anteriormente, el ex alcalde de Bogotá Jaime Castro dimitió de la Comisión de Antigüedades Náufragas en desacuerdo con la Ley; lo mismo que Emilio Piazzini, subdirector del Instituto de Antropología e Historia (Icanh) renunció a esta entidad.
El representante de Polo Democrático, Wilson Arias, afirmó en el breve debate: "Lamento que al momento inicial este proyecto hablara del 10 a 25 por ciento para los exploradores y ahora les entregarán 50 por ciento".
La ponente de la ley Juana Carolina Londoño, pidió el voto positivo para un proyecto que ha sufrido llamativos cambios, entre ellos la subida al más del doble del porcentaje para las empresas extractoras.
Al final del debate, la Ministra de Cultura Mariana Garcés, agradeció a los congresistas.