Scott Carter esculpe con trozos de pared de la galería en la que después expone
El artista usa los materiales con que está construida la sala de exposiciones. Utiliza la galería como estudio y diseña, recorta y monta sus obras in situ. En su último proyecto mezcla el cartón yeso con instrumentos musicales que se destruyen al tocar con ellos.
El busto clásico se expone sobre una mesa construida con dos caballetes y una tabla blanca. Las paredes de la sala, seguramente de cartón yeso, tienen parte de la superficie arrancada y exhiben la estructura de metal que une los paneles. El inusual aspecto de la habitación tiene que ver con la obra, fabricada precisamente con los trozos de pared que faltan.
El estadounidense Scott Carter (Kentucky, 1984) describe su trabajo como un "caos funcional" y se interesa por la conexión que establece el ser humano con la construcción. El artista entrelaza el arte con el diseño y la arquitectura, examina las cualidades de los materiales y su función y se fija en cualquier elemento constructivo que esté presente en una sala de exposiciones.
Empezó a experimentar con el cartón yeso, apilando y esculpiendo las planchas. Cuando se cansó del proceso, en un momento meditativo y mientras miraba fijamente una de las paredes de su estudio, pensó en fabricar una mesa sólo con el material que le proporcionara el tabique. Desde entonces ha desarrollado la técnica para crear diferentes diseños que fabrica en la misma sala en la que se mostrarán al público: "la galería se convierte en un lugar de producción y también en el producto mismo".
Un busto neoclásico olvidado.
En Less is More (Menos es más) una habitación de paredes que parecen las páginas de una revista recortada es el escenario para dos sillones blancos, producto de los retales rectangulares y cuadrados; en A Temporary Engagement (Un compromiso temporal) una mesa de escritorio y una humilde silla permanecen en una estancia dominada por numerosas siluetas geométricas.
Carter utiliza la sala como estudio, adaptando el proyecto al espacio disponible, creando plantillas, cortando y armando las obras. Otras veces llega con la idea ya preparada, en busca del material para desarrollarla.
Para el busto de Departing From the Rules of Harmony (Partiendo de las normas de la armonía) el artista quiso reproducir un autorretrato original del escultor neoclásico italiano Antonio Canova que se encuentra en el Instituto de Arte de Chicago. Con la réplica del busto, el autor cuestiona los criterios por los que se seleccionan las obras de una exposición: en los 36 años que ha permancido en la colección permanente del museo, la escultura de Canova nunca ha sido expuesta.
Una batería, guitarras y equipos de sonido.
Aunque los trabajos demuestran una gran destreza, el autor considera que a veces pueden resultar "estériles" y por eso ahora desarrolla un lenguaje más crudo y expresivo con un acercamiento a la performance. En sus últimos proyectos, mezcla su rol de artista con el de músico y usa cartón yeso y mariales de construcción con "objetos ya existentes como una batería, altavoces y un antiguo equipo de audio".
Carter combina los elementos para crear instrumentos que se destruyen con el uso. "Como músico y artista/fabricante, esa combinación de sonido, actuación musical y derribo se refiere a mis múltiples intereses creativos", explica.
Disonar, su última instalación, es un conjunto de guitarras, partes de una batería y equipos de sonido que se exhibe estos días en el Centro de Arte Evanston de Illinois. A la clausura de la exposición —el 23 de marzo— el artista y dos músicos más darán un concierto con los instrumentos: "La acción destruirá la instalación al completo, dejando una escena similar a la de una demolición".