Una subida espectacular. De 100.000 a 3.36 millones de euros
El mercado del arte siempre cuenta con sorpresas. Una pintura china realizada sobre seda china del siglo XVII ha sido comprada al teléfono por un coleccionista chino por la desorbitada cifra de 3.36 millones de euros cuando partía en 100.000 euros.
Se trata de un fragmento de una tela de varios metros de longitud llevada a cabo por Wang Hui (1632-1717) en la que se describe un viaje del emperador Kagxi al sur del país llevado a cabo en 1690.
La subasta, preparada por el comisario Alain Briscadieu en el Hotel Bordeaux Sainte Croix de la ciudad francesa, tuvo momentos de gran emoción con dos coleccionistas chinos que pujaron por la pieza hasta alcanzar la cifra señalada.
Philippe Delalande, experto que asistió en el proceso de catalogación de la pintura, señalaba que “esperábamos un remate alto, pero posiblemente el nivel que se ha alcanzado”. Sin duda alguna, una de las subidas más espectaculares de los últimos tiempos en una subasta.