Francia cambiará los cortes de internet a la «piratería» por un canon digital a móviles y tabletas
Un informe de expertos encargado por Hollande propone un nuevo impuesto «extremadamente pequeño» para financiar la cultura en el país galo.
La ley de Sarkozy contra las descargas ilegales en internet tiene las horas contadas. El Gobierno de Hollande suprimirá de raíz los cortes de Red a los «piratas» y minimizará las multas, según ha declarado la ministra de Cultura gala después de presentar un informe de expertos que propone nuevas formas de subvencionar la producción cultural del país.
«Para los internautas, hay que señalar que no habrá más cortes de internet decididos por un juez», porque supone un «atentado grave contra una libertad (la del acceso a internet) reconocida por el Consejo Constitucional», explicó la ministra de Cultura, Aurélie Filippetti.
Hasta ahora, los internautas franceses recibían un aviso en su casa cuando la administración francesa detectaba que habían intentado descargarse un contenido ilegal. La primera carta era una advertencia sin sanción, pero si en los meses siguientes eran cazados de nuevo, llegaba la multa, que podía alcanzar los 1.500 euros.
El nuevo texto que estudia ahora Francia, conocido como «informe Lescure» por el nombre de su autor (el expresidente del Grupo Canal +, Pierre Lescure), no pide la retirada de las cartas, pero sí reclama una rebaja de las multas hasta los 60 euros, el precio de un abono anual en una plataforma legal para escuchar música en línea.
Canon digital a los móviles.
Otra de las medidas estrella propuesta por el informe es adoptar un nuevo impuesto destinado a fabricantes y vendedores de ordenadores, tabletas, teléfonos inteligentes y televisiones con conexión a internet, para financiar así los contenidos culturales.
De esta manera, todos esos dispositivos se verían gravados por un canon digital «extremadamente pequeño», según Cultura, y serviría para alimentar «una especie de cuenta de apoyo a las industrias creativas: la música, el cine, la fotografía y el videojuego, que crean empleo en Francia».
El texto, redactado a petición del presidente de Francia, François Hollande, es el resultado de nueve meses de trabajo y cientos de entrevistas con distintos agentes del sector cultural francés.
El "Informe Lescure" traza también otras líneas de actuación política, como reducir de 36 a 18 meses el tiempo mínimo que debe transcurrir entre la llegada de una película a las salas de cine y su explotación en pago por visión.