Goya subasta sus grabados maestros
A las casas de subasta el sueño de la razón hace tiempo que no les produce monstruos, sino dinero.
Mucho. Excepcionalmente, Christie’s Nueva York remata en una única jornada —28 de enero— las cuatro series de grabados más poderosas de la imaginería de Goya. En un solo día salen a la venta joyas como Los caprichos (300.000 a 400.000 euros), Los desastres de la guerra (120.000 a 150.000), La tauromaquia (340.000 a 490.000 euros) y Los proverbios, también conocida como Los disparates, (120.000 a 190.000). Algunas son primeras ediciones completas o, incluso, pruebas de taller anteriores a que vieran la luz comercialmente.
Desde la mirada de los números, si sumamos las cuatro series necesitaríamos como mínimo 880.000 euros —más el 30% de la comisión de la sala— para hacernos (si fuéramos un coleccionista con un bolsillo muy holgado) con ellas. Mientras que si calculamos su banda máxima haría falta 1.280.000 euros para conseguir todo el conjunto de grabados, más la prima de Christies's.
Procedentes de una colección particular, la subasta se construye con 34 lotes (entre los que figuran esos cuatro grandes trabajos). Entre ellos también hallamos estampas sueltas de una maestría incuestionable.
Quizá, por destacar algunas piezas, el grabado (imagen de apertura) Con razon ó sin ella (60.000 a 90.000 euros) nos revela que Goya retrataba la muerte como nadie porque la conocía de primera mano. Presenció muchas sangrías, ejecuciones, asesinatos. Sabía cómo moría un hombre. Conocía el dolor. También perteneciente —como Con razon ó sin ella— a Los desastres de la guerra (80 láminas), la plancha Se aprovechan (60.000 a 90.000 euros) nos devuelve al horror del comportamiento del ser humano y en Fuerte cosa es! (60.000 a 90.000 euros) la tortura y el ensañamiento nos enfrentan, una vez más, a la muerte.
En Los disparates, el genio aragonés habla y dibuja de sueños, sexo y violencia. En la subasta busca comprador una carpeta completa (según afirma Christie's) de 18 imágenes de las 25 que, en principio, se supone que estaba compuesto todo él trabajo. Aunque nunca se llegaron a estampar más de 22. Entre las obras que se rematan independientemente sobresalen Por no temor no pierdas honor (5.300 a 7.500 euros), Tras el vicio el fornicio (4.500 a 6.000 euros) y Disparate pobre (4.500 a 6.000 euros).
Aunque la serie que puede alcanzar un precio más elevado es La tauromaquia. Creada entre 1814 y 1816, y compuesta por 33 grabados, Goya lleva su talento al drama de los toros. El trabajo comienza con imágenes de los orígenes y la historia de la fiesta y termina con las acrobacias y requiebros de Martincho, quien fuera un extraordinario, según las crónicas de la época, torero de a pie. Tal vez dentro de las estampas que se venden aisladas la más atractiva sea Mort de Pepe Hillo (5.300 a 7.500 euros).
Ahora bien, analizando esta treintena de lotes que componen esta excelente colección de grabados merece la pena darle tiempo y mirada a El agarrotado (14.000-19.000 euros), una de las imágenes más repetidas del maestro. Pero, sobre todo, fíjense en dos rarezas: Vieja hilando (23.000 a 37.000 euros), de 1819, y Grupo con mujer dormida (38.000 a 52.000 euros), una litografía fechada en 1822, solo seis años antes de la muerte del artista en la que, a pequeña escala (147 x 175 mm), ya avanza mucha de la pintura que vendrá.
No es extraño que Los caprichos y Los desastres de la guerra sean parte, desde 2009, de la colección permanente del Museo Reina Sofía. Con Goya empieza el intenso viaje a la modernidad. El caminar de un genio.