Adepi afirma que Ley de Propiedad Intelectual «arruinará» al sector cultural
La entidad que agrupa a las ocho entidades gestoras de derechos de autor españolas arremete contra la reforma que prepara el gobierno de Rajoy.
Adepi, entidad que agrupa a las ocho entidades gestoras de derechos de autor en España, considera que el Gobierno de Mariano Rajoy «ultima» una reforma de la Ley de Propiedad Intelectual que «arruinará al sector cultural».
A través de un comunicado de prensa, esta entidad ha rechazado la reforma planteada por el Ejecutivo y ha denunciado que el actual texto «agravará» la situación de crisis por la que atraviesa el sector cultural, que ha experimentado «una alarmante caída en el empleo».
Para Adepi, el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, «ultima» el proyecto de ley «sin contar» con el sector de la cultura, «cuyos derechos de propiedad intelectual pretende regular».
«Tampoco ha tenido en consideración las recomendaciones del Consejo de Estado ni del Consejo General del Poder Judicial, contrarias en muchos aspectos al proyecto elaborado por el secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, y su equipo», agrega el texto.
En este sentido, desde Adepi se ha señalado que España «se convierte en una excepción cultural negativa entre los países de nuestro entorno», los cuales, a su juicio, «sí protegen la industria cultural» y «elevan» la protección de los derechos de propiedad intelectual como «elemento indispensable» para la creación de empleo, riqueza y diversidad cultural.
Las entidades agrupadas en Adepi (Agedi, AIE, Aisge, Cedro, DAMA, Egeda, SGAE y Vegap) solicitan a los grupos parlamentarios que durante el trámite en Congreso y Senado «escuchen» a los afectados por esta reforma y «analicen» los «rigurosos informes y estudios» publicados, incluyendo los dictámenes de los principales órganos consultivos.
«En sus manos está mejorar una Ley de Propiedad Intelectual cuya propuesta de modificación nos aleja de Europa, además de introducir confusión en el mercado y desconcierto en los usuarios, aumentar la los litigios y beneficiar únicamente a las empresas tecnológicas, que se enriquecen con la explotación de los contenidos de los creadores», concluye la nota.