Cultura arruina la fiesta a las galerías: recorta la promoción del arte en el extranjero
Este jueves, viernes y sábado las galerías de Barcelona, Valencia, Galicia y Madrid están de fiesta.
Han inventado la apertura de nueva temporada, unidas, a la misma hora, el mismo día, para mostrarse como un colectivo más hermanado que nunca ante las adversidades. Tres días de celebración para demostrar que “afrontamos con ilusión el curso que arranca”.
Alberto de Juan, Presidente del Consorcio de galerías españolas de arte contemporáneo, acostumbra a ser optimista en sus perspectivas: “El que no esté ilusionado tiene por delante un año muy crudo”. Sin embargo, las tormentas no las trae únicamente Cristóbal Montoro, en forma de falsa reforma del IVA, el BOE hacía públicas las nuevas cuentas del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte en el fomento del arte contemporáneo español: un recorte del 41% respecto al año anterior.
La Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales y de archivos y Bibliotecas, administrada por Jesús Prieto, anuncia que las ayudas a las galerías de arte, “para la asistencia a ferias en el exterior, con el objetivo de fomentar la creación, la difusión de las artes visuales contemporáneas, así como el desarrollo de un contexto más dinámico e innovador”, es de 101.000 euros, repartidos entre 37 galerías. Las que más reciben son la Galería Elvira González y Polígrafa: 3.354 euros para trasladarse a Art Basel. Las que menos recibirán 2.360 euros.
“Esta ayuda supone entre el 5% y el 8% del gasto que haremos en el traslado a la feria de arte internacional. Es bajísimo”, explica De Juan. “Los galeristas nos encargamos de hacer promoción de la cultura y de la imagen de España en el extranjero, recorremos los lugares más importantes del coleccionismo del arte contemporáneo del mundo”, justifica el Presidente del Consorcio la inversión.
Al revisar el apoyo que ha mantenido el Ministerio en la promoción del arte desde 2010, el recorte es todavía más llamativo. En 2013 se destinaron 171.000 euros, para facilitar la participación de 60 galerías en ferias en el extranjero. En 2012 la cifra ascendía a 900.000 euros para la misma actividad. El año anterior se tocó el techo con 1.225.000 euros. En 2010 fueron 860.000 euros.
Los galeristas explican que este retroceso en los incentivos a exportar arte al extranjero supone un aislamiento de la industria y de las prácticas artísticas. Alberto de Juan cuenta que su galería, Max Estrella, vende en el extranjero, aproximadamente, dos tercios del total. “Pero hay galerías que ya venden el 90% fuera, porque el coleccionismo español ha disminuido. No es una cuestión de impuestos, sino de búsqueda de clientes”, añade.
Es la principal reivindicación: que toda ayuda que tenga el Ministerio se invierta en el fomento a la difusión del arte contemporáneo en el extranjero desde las galerías, con destino a museos y otras galerías. De Juan asegura que en las reuniones mantenidas con la Secretaría de Estado de Cultura se había advertido que era esencial el mantenimiento de estas ayudas. La respuesta ha sido el recorte. “Estamos hablando de cacahuetes”, se pregunta el galerista.
Álex Nogueras, vicepresidente del Consorcio y galerista de Nogueras Blanchard, hace números: “Son ayudas muy pobres y las ferias son cada vez más caras. En Frieze Nueva York, el stand pequeño cuesta 25.000 euros. A ello tienes que sumarle los seguros, el transporte de obra y los billetes”. De hecho, recibirá 2.609 euros en ayudas para mover a sus artistas a los EEUU.
El mayor peligro que ven los galeristas es que el arte español se convierta en un arte de autoconsumo, que no se mezcle ni comparta experiencias más allá de Pirineos. Además, se rebajan las expectativas y se acude al plan B: ferias más marginales y económicas.
Fuente El Confidencial (Peio H. Riaño): Cultura arruina la fiesta a las galerías: recorta la promoción del arte en el extranjero...