España tiene potencial para disputar la carrera del lujo con grandes marcas
¿Por qué no imaginar una marca de lujo española con la dimensión de Inditex o Mango?. Para la profesora del Instituto de Empresa, María Eugenia Girón, España tiene potencial para desarrollar un gigante del lujo internacional, un sector dominado ahora por dos grandes grupos franceses, LVMH y PPR, que han conseguido resultados récord en el último ejercicio.
En declaraciones a RTVE.es, Girón considera que se podría construir un gran grupo del lujo pero "el reto de la industria es transformar la creatividad en rentabilidad". Su receta es "tiempo, recursos y vocación de ser internacional". Precisamente, lo que han hecho marcas como Zara, Massimo Dutti y Mango, que han conseguido un hueco en el exclusivo boulevard Vittorio Emmanuele de Milán, antes un santuario reservado a las grandes firmas italianas.
España "tiene capacidad para ser una referencia mundial en los productos de alta gama", según Girón. En su opinión, nuestro país auna la capacidad artesanal, con oficios que en otros lugares se han perdido como el de cincelador en orfebrería, y la capacidad creativa.
La autora de Secretos de lujo matiza que la artesanía no es suficiente. "Es necesario un diseño innovador y atractivo para el mercado internacional", asegura. Algo que se podría hacer con "mayor eficiencia" porque "la carrera del lujo se disputa fuera", dado el reducido tamaño del mercado español, un 5% del total europeo.
Las firmas españolas se mueven y acaban de unirse en Luxury Spain, la Asociación Española del Lujo, que agrupa a empresas hosteleras, inmobiliarias, de moda, joyería, salud, belleza, viajes, automoción y educación. Un sector que generó en España 3.600 millones de euros en 2010.
La experta del IE Business School reduce el sector a la moda, accesorios, joyería, relojes, perfumes y cosmética de alta gama, y en su lista de firmas de lujo con talla internacional solo se cuelan tres nombres españoles: Loewe, que forma parte del primer grupo mundial, la joyería Carrera y Carrera, y la marca de calzado Pedro García.
Girón valora como "buena iniciativa" la creación de Luxury Spain para compartir ideas e impulsar el sector del lujo, uno de los pocos reductos industriales donde Europa tiene todavía una ventaja competitiva respecto al resto del mundo.
En España tiene un peso relativo muy importante la perfumería. El sector del lujo es "aspiracional" y el común de los mortales no puede permitirse destinar el sueldo de medio año a comprar un bolso. Sin embargo, es usual regalar un perfume de alta gama cuyo precio ronda los 100 euros. En este mercado, la marca catalana Puig apuesta a lo grande y ya posee el 60% de Jean-Paul Gaultier.
Las buenas perspectivas del turismo este año repercutirán "positivamente, sin duda, en el sector del lujo", apunta Girón. Probablemente los mejores clientes de las tiendas exclusivas de la calle Serrano tengan los ojos rasgados. China es ya el segundo mercado mundial del lujo y crece un 20% anual, mientras que en el mercado del arte es el número uno.
"España -señala la profesora del IE- es un destino muy atractivo para los extranjeros, por la alegría de vivir, la calidez, el estilo de vida mediterráneo pero con características propias". Hay margen de mejora en la hospitalidad de lujo donde un factor clave del éxito es la "excelencia del servicio", una característica que en Asia forma parte de su cultura.
Los hoteles de lujo tienen el reto de consolidarse y fidelizar a la clientela, deben "no solo estar a la altura de las expectativas sino superar las expectativas e ir más allá en la exclusividad", según Girón, que recuerda que la competencia directa son los hoteles de lujo asiáticos.
Otro punto fuerte es el turismo gastronómico pese al cierre de El Bulli. Para la experta en el sector del lujo, el restaurante de Ferrán Adriá "abrió un camino que transformó la restauración en España y esto es un carro imparable".
Los españoles que juegan en la primera liga de la gastronomía mundial siguen revalidando la excelencia y conservando las estrellas de la Guía Michelin, además "esto arrastra al segmento del lujo dentro de la alimentación con el aceite y los vinos" asegura Girón.
Pero, ¿cuál es el futuro del lujo y cuál será la próxima marca española en hacerse un hueco en este exclusivo club? La experta del IE apuesta por Joaquín Trías, un joven diseñador de 28 años que ha desfilado en Nueva York y "ha tenido claro desde el principio que tenía que lanzarse al mercado internacional".
Este creador "ha hecho lo más díficil", porque con un producto de alta gama "no podía quedarse en el mercado español" y, en los próximos años, Girón está convencida de que "se establecerá como marca de primera división en el mercado del lujo mundial".