Tresserres acusa a Cultura de maniobrar por los «papeles» de Salamanca
Los hijos del fotógrafo Agustí Centelles, Sergi y Octavi, aseguraron hoy que se les "han caído las lágrimas" porque el archivo de su padre se vaya de Cataluña, y que pese a que les duele "muchísimo", el legado se irá porque se han sentido "muy menosopreciados" por la Generalitat.
En declaraciones a Cataluña Radio recogidas por Europa Press, los hermanos destacaron que este año ha sido el centenario del nacimiento de su padre y, por lo tanto, "era el año" para hacerle un homenaje proporcional a su valor en el mundo del fotoperiodismo.
Criticaron que a su padre le hagan una exposición en el Arts Santa Monica cuando a Robert Capa se la hacen en el Museu Nacional d'Art de Catalunya (Mnac) con "una millonada" de presupuesto. El malestar de la familia viene de años, ya que aseguraron que siendo Jordi Pujol presidente de la Generalitat, ya consideró que "era poco político hablar de estas cosas".
Uno de los hermanos aseguró que secundará al archivo y se irá de Cataluña: "No me iré a vivir al otro lado si no me empujan, pero estamos muy dolidos", aseveró. En términos de difusión, aseguraron que su interés es ver "reconocida internacionalmente" la obra de su padre con exposiciones, por ejemplo, en Estados Unidos.
La postura de la Generalitat
Por su parte, el consejero de Cultura y Medios de Comunicación de la Generalitat catalana, Joan Manuel Tresserres, consideró hoy que en la compra del archivo fotográfico de Agustí Centelles por parte del Ministerio de Cultura hay una "maniobra política" por los papeles de Salamanca. El consejero le transmitió esta idea también a la ministra de Cultura, Angeles González-Sinde, y le dijo que tenía que entender que era "de una gravedad extraordinaria".
"En ningún momento" la Generalitat supo del interés del Ministerio por este archivo, se quejó el consejero, quien aseveró que ni la familia ni el Ministerio puede utilizar como "coartada que la Generalitat no ha tenido interés" en adquirir el archivo.
